Viaje a Nueva York, maratón y más
¿Quién de ustedes, viendo imágenes del río de personas cruzando el puente Verrazzano al comienzo del maratón, nunca ha pensado en participar y hacer un viaje a Nueva York?
Me gusta correr así que decidí combinar el maratón con unas vacaciones en la Gran Manzana e incluso si usted no es un profesional (yo de hecho no lo soy) todavía se puede participar, incluso alternando correr y caminar, por lo que puede disfrutarás del ambiente festivo que respiras por toda la ciudad.
Para participar en el maratón no profesional, puede ponerse en contacto con operadores turísticos socios de NYRR que operan en tu Paìs. Esta es la solución más simple e incluso la unica en caso de que desee inscribirse después de la fecha limite (febrero).
Los operadores están obligados a asociar un paquete con la participación que generalmente consiste en:
- dorsal + vuelo
- dorsal + hotel
- dorsal + vuelo + hotel
En el sitio web de NYRR puede ver los operadores de ejecución aprobados para diferentes países.
Participé con Born2Run comprando el paquete de 4 días dorsal+hotel (2194 euros para 2 personas, 1097 por persona). Es una solución simple y flexible, pero ciertamente no económica.
Si participas en el maratón al día siguiente vete a comprar el New York Times, encontrarás todos los nombres de los participantes (¡también los tuyos!) con los tiempos relativos; yo no lo sabía y me enteré muy tarde 😔. El día después del maratón, el lunes, es el Medal Monday y verás a todos los participantes de la ciudad vistiendo la medalla con orgullo enseñando el resultado de tantos esfuerzos y sacrificios.
La primera vez en Nueva York (en realidad para mí fue la primera vez absolutamente en los Estados Unidos!) está lleno de expectativas y con algunas sugerencias os aseguro que no os decepcionaréis.
INDICE
Cómo moverse en Nueva York
Para los viajes siempre prefiero caminar, pero las distancias en NY son relevantes por lo que en algunos casos es útil utilizar el transporte público; metro, autobús, taxi, ferry, la elección es amplia y depende de sus propias necesidades.
Metro
En NY el metro puede parecer algo aterrador (25 líneas y 460 estaciones!), en realidad es más simple e intuitivo de lo que se podría pensar.
En primer lugar no hay áreas como en otras metrópolis donde el costo del billete puede variar, el billete siempre cuesta lo mismo en toda la zona de la red metropolitana.
Las líneas de metro se identifican mediante un número (o letra) y un color; el color hace referencia a un grupo de líneas que comparten parte de la ruta pero tienen diferentes terminus. También haz caso a los trenes expresos y locales:
- Un tren local para en todas las estaciones de su línea.
- Un tren expreso se detiene sólo en algunas estaciones en su línea (indicado con un punto blanco en el mapa).
Los trenes que se dirigen al norte tienen la dirección «Uptown/Bronx», los que van hacia el sur «Downtown/Manhattan«.
Cuando llegues a las estaciones de metro, necesitas encontrar la plataforma correcta, dependiendo de si quieres que el tren vaya al norte o al sur, dependiendo de dónde necesites ir. Siempre hay señales que os van a ayudar.
La mayoría de las estaciones os permiten llegar a ambos muelles desde cada entrada.
El instrumento en el que se basa el transporte público en Nueva York es la Metrocard, la Tarjeta de Transporte de Nueva York. Gracias a esa carta, tendrás acceso a simples corridas y fórmulas de suscripción más baratas.
La emisión de una tarjeta Metrocard cuesta 1$, y eso pasa cada vez que comprais una tarjeta nueva. Luego podeis cargar la carta como os parece con las opciones que mejor se adapten a sus vacaciones. Parece un billete de metro, pero recuerdair de no tirarlo, incluso si os quedais sin viajes, podeis siempre volver a cargarlo. De lo contrario, tiene que pagar 1$ para emitir otra carta.
Si os movéis poco con el metro podéis cargar y pagar por viajes sencillos (MetroCard Pay-per-Ride), el precio es de 2,75 $ por viaje (con un ahorro de 0,25 $ por viaje respecto al viaje único).
Una unica tarjeta de metro puede ser utilizada para un máximo de 4 personas. Los bonos disponibles son los siguientes:
Unlimited ride Metrocard – Pase de 7 días
El Metrocard Unlimited es una pase para al metro de Nueva York y autobuses urbanos, con viajes ilimitados durante 7 días. La tarjeta de 7 días (7 días-Unlimited-Ride-Card) cuesta 33$ y es válida hasta la medianoche del séptimo día después de su primer uso.
Unlimited ride Metrocard – Pase de 30 días
La segunda versión es válida durante 30 días (30-Day-Unlimited-Ride-Card) y vale 127$, con el mismo principio que la anterior.
La tarjeta de metro Ulimited solo puede ser utilizada por una persona. La otra limitación es que no se puede pasar dos veces en la misma estación, si no esperando 20 minutos. Es una especie de maniobra antifraude.
Usted puede comprar la Metrocard en las estaciones de metro en las taquillas automáticas que aceptan tarjetas de crédito y débito y en algùn caso tambien el dinero en efectivo. En las estaciones que tienen la taquilla se puede comprar directamente allí, en efectivo.
Si llega desde JFK con el Airtrain, en las mismas taquillas donde comprais el billete del Airtrain también puede comprar su Metrocard.
La Metrocard es una tarjeta de papel con banda magnética. Es muy delicada, no debe ser torcida, expuesta a la luz fuerte o fuentes de calor, y debe ser alejado de imanes y fuentes magnéticas. De lo contrario, podría desmagnetizarse. También tratad de mantenerla limpia porque podrìa darlos problemas en pasarla en los torniquetes. En este caso, limpiad la banda negra con los dedos quitando el sucio/graso, etc., y tratad de pasarla de nuevo.
Autobús
Los autobuses de transporte público son eficientes y seguros y os permitirán disfrutar de la vista de la ciudad durante el viaje. Es necesario pero tener en cuenta el factor tráfico que va a subir el tiempo de viaje que tienden a ser más largos que los del metro.
La ciudad de Nueva York tiene una estructura de rejilla por lo que incluso las rutas de autobús son bastante intuitivas, proceden en dirección norte-sur, a lo largo de las Avenue, o en dirección este-oeste, a lo largo de las Street. Las paradas se encuentran más o menos en cada cuadra, en la intersección de Avenue y Street (una señal redonda con un autobús indica la parada).
Las líneas de autobús están marcadas con letras, números y colores.
Las cartas indican el distrito al que opera ese autobús principalmente:
B – Brooklyn
Bx – Bronx
M – Manhattan
Q – Queens
S – Staten Island
Cuando la letra X está presente, significa que el autobús es un autobús exprés (estos son autobuses nacidos principalmente para favorecer a los viajeros, trabajan principalmente entre Staten Island y el Bronx y Manhattan, y raramente son utilizados por los turistas, que no necesitan llegar a las áreas más periféricas).
En la página web de la MTA (que gestiona el servicio de autobús y metro), se pueden descargar los mapas con las rutas.
En los autobuses recuerda que siempre entras por las puertas delanteras (es suficiente enseñar el billete de viaje al conductor) y sales de las puertas centrales o traseras, con los mismos billetes y suscripciones que usas para el metro (MetroCard Pay-per-Ride, MetroCard Unlimited) o pagando en efectivo la cantidad exacta (en monedas). Si usted paga en efectivo y necesita hacer un cambio, debe pedir al conductor un transfer ticket para continuar el viaje por otro medio.
En general recomendaría el autobús para viajes cortos, y para viajes más largos es mejor confiar en el metro con el fin de evitar el tráfico y ahorrar tiempo valioso en vuestro viaje a Nueva York.
Taxi
El taxi, el Yellow Cab, es uno de los símbolos de Nueva York y es un modo de transporte rápido y más o menos barato si lo comparais con las tarifas italianas (y aún más si los compartes con otros pasajeros).
Durante las horas de mayor actividad, pueden ser una gran alternativa al uso de las líneas de metro más concurridas. Llamándolos no es nada difícil, el letrero en el techo iluminado indica que el medio es libre, en este punto será suficiente para levantar el brazo. Los puntos estratégicos desde los que llamar a los taxis son las esquinas de las calles o las inmediaciones de los hoteles.
También es aconsejable decirle siempre al taxista la calle o la avenida y la intersección más cercana, y dejarle una propina (generalmente 15% está bien).
Ferry
Los ferris, conocidos como NYC Ferry, te llevan desde y hacia Manhattan de una manera barata y fácil. ¿Queréis visitar Brooklyn o Queens? ¡Aprovechad de ello para cruzar el East River en ferry y disfrutar de las vistas del horizonte durante el viaje! El ferry es una buena alternativa al metro, a menudo lleno de gente; los tiempos de espera pueden ser un poco más largos pero es muy agradable la ruta del barco, por esta razón recomiendo tomarlo al menos una vez.
Los boletos para el ferry de NYC cuestan2,75$ por viaje y se pueden comprar en las máquinas de boletos en cada muelle. El costo del viaje en ferry es el mismo que el del metro, sin embargo, los billetes de metro no se pueden utilizar para el ferry.
NYC Ferry hace seis rutas durante todo el año: East River, Astoria, South Brooklyn, Rockaway, Lower East Side y Soundview. Hay cinco muelles en Manhattan, uno en Wall Street/Pier 11, Corlears Hook, Stuyvesant Cove, East 34th Street y East 90th Street. Además, hay varias paradas en Brooklyn y Queens. Durante la temporada de verano, y solo los fines de semana, hay una parada adicional, en Governors Island en las rutas East River y South Brooklyn.
Manhattan, qué hacer y ver
El viaje a Nueva York definitivamente comienza desde Manhattan, os recomiendo que comenzáis con un paseo a lo largo de la High Line, un parque lineal hecho de una sección en desuso del ferrocarril elevado (entrad desde la calle Gasenvoort), es una ruta agradable en la que parar para algunas photos sugerentes.
Si tenéis hambre no hay problema porque podéis ir al Chelsea Market, encontrararéis una amplia selección adapta a satisfacer todos los gustos (Hamburguesa, tailandés, japonés, ostras, langostas y no cito más).
Satisfechos y felices podéis continuar el paseo hacia el sur, entrararéis en Greenwich Village, el corazón de Manhattan, no olvidáis de pasar cerca de la casa de Carrie Bradshaw (Sex&the city, «64th Perry Street, New York, NY 10014») o el edificio que huespedaba el apartamento de Monica de Friends («90 Bedford St., New York, NY 10014»).
Desafortunadamente en frente de la escalera de la casa de Carrie se colocó una cadena para evitar que los turistas acosaran a los inquilinos y adémas dentro del edificio de Friends, en la planta baja, no se puede encontrar el famoso café «Central Perk» pero un bar restaurante, «El Little Own» sin embargo, el paseo por el vecindario vale la pena, así que disfrutad de la calles bordeadas de árboles y detened en uno de los muchos cafés encantadores que encontraréis en el camino.
Para vuestro viaje a Nueva York recomiendo comprar el City Pass, permite el acceso a las 6 principales atracciones de NY por el precio de 125 euros (se puede comprar por internet). Si no estáis seguro y tenéis poco tiempo disponible os sugiero la opción que hemos elegido nosotras, City Pass C3, cuesta 85 euros y permite el acceso a 3 atracciones a elegir entre las 11 disponibles sin la obligación de indicar cuáles; es muy conveniente porque tenéis la libertad y flexibilidad para elegir dónde pararse.
A continuación se muestran las 3 opciones elegidas por nosotras.
Empire State Building
Es uno de los edificios más emblemáticos de Nueva York y la vista de la ciudad es impresionante; a 381 metros (443 considerando también la antena de televisión) fue el edificio más alto del mundo desde su construcción, terminado en 1931, hasta 1973, el año de construcción de las Torres Gemelas. En 2001, después del ataque a las Torres Gemelas, recuperó el récord del rascacielos más alto de Nueva York hasta la construcción del One World Trade Center, que tomó el lugar de las Torres Gemelas. Se mantiene todavia en el podio, ocupando el tercer lugar entre los rascacielos más altos de los Estados Unidos después del One WTC y la Sears Tower en Chicago.
La lista de películas en las que aparece este edificio es muy larga, pero seguramente en la memoria de todos es fuerte el recuerdo de King Kong colgando del rascacielo y esquivando los avionesr. En la segunda planta entre las diversas exposiciones hay una dedicada al mono gigante. También recomiendo explorar el vestíbulo, que es uno de los pocos interiores en la ciudad de Nueva York que ha sido reconocido como un monumento histórico. Si miras hacia arriba, verás que hay hojas de aluminio y oro de 24k en el techo.
Museo de Arte Moderno (MoMA)
Un día de lluvia o un día extremadamente frío y ventoso son ideales para encerrarse en el MoMA; atención porque es enorme y corréis el riesgo de gastar horas y horas sin daros cuenta; No os perdéis la sección de arte pop (Warhol, Haring) y los surrealistas (Dalí, Mirò, Maigritte, Picasso, etc.).
Estatua de la Libertad y Ellis Island
Un clásico; Si usted ha planeado su viaje a Nueva York con mucha antelación puede tratar de comprar un billete para subir al pedestal o incluso mejor hasta la parte superior de la corona; los asientos son limitados (se puede tratar de comprar entradas en el sitio). En este caso, no incluyas esta atracción en el City Pass, eligas otra porque el pase de la ciudad incluye solo el ferry a Liberty Island y Ellis Island más la entrada a los 2 museos, el Museo de la Estatua de la Libertad (donde dan información sobre cuándo y cómo se construyó la estatua) y el Museo de Inmigración de Ellis Island (fue la isla donde los inmigrantes fueron desembarcados para ser registrados y visitados antes de entrar en América).
Cuando llegáis a Liberty Island os dan una audioguía que os permite dar la vuelta admirando los diversos detalles y escuchando una gran cantidad de información e información Curiosidad. ¿Sabíais que la estatua no era originalmente verde?
Te aconsejo que tomáis el ferry a Staten Island temprano en la mañana (a 8-9) para evitar colas y Esperado. Si también os detienéis en Ellis Island (lo recomiendo) estaráis regresando para el almuerzo.
Wall Street y World Trade Center
Hagáis un paseo al Distrito Financiero para tomar una foto con el famoso toro de Wall Street (Charging Bull in Bowling Green Park); sabìais que trae buena suerte tocar las bolas del toro!
Y finalmente parense a descansar un poco y comer una buena hamburguesa, recomiendo Bill’s Bar y Burger, a los 10 minutos a pie de donde el ferry os dejará. También está la opción vegana, el Beyond Burger.
De esta manera estaráis a 2 pasos del World Trade Center y el memorial del 11 de septiembre donde se encontraban las torres Gemelas.
Si queréis, podéis ir a visitar el Museo, nosotras lo evitamos porque habría sido muy conmovedor y no habíamos un estado de ánimo adecuado para afrontar la visita. Es subjetivo, la visita al Museo del 11 de Septiembre es una de las 11 atracciones que se pueden incluir en el City Pass (C6 o C3).
Little Italy
Entre los lugares que quería visitar durante mi viaje a Nueva York también había Little Italy, sé que puede parecer trivial, pero estaba demasiado intrigada y lo consideré una parada obligatoria en Manhattan. El barrio se encuentra en el Bajo Manhattan, en los mapas de Google se puede encontrar fácilmente, bordeando China Town, incluso si este último está literalmente tragando el barrio italo-estadounidense.
No escondo la decepción, todo se reduce a unas pocas cuadras llenas de restaurantes en ruinas con nombres italianos dudosos.
Después, navegando por la red, descubrí que hay otra Little Italy, más próspera y auténtica, se encuentra en el Bronx (Belmont). No he estado allí, así que no sé si vale la pena o no.
SoHo y TriBeCa
La decepción pronto se desvaneció paserando por los barrios de SoHo y TriBeCa.
SoHo significa al sur de Houston porque se encuentra al sur de Houston Street. El barrio es característico por los edificios de hierro fundido y casas de ladrillo rojo con escaleras de extinción de incendios afuera. Estas eran mi pasión en Nueva York porque me recuerdan muchas películas y programas de televisión, me gustan mucho!
Sólo para los edificios de hierro fundido SoHo es apodado «Cast Iron District», un distrito de hierro fundido.
Algunos edificios datan de finales de 1800. En ese momento el hierro fundido era más barato que el ladrillo y luego se utilizaba para decorar las fachadas. A lo largo de Greene Street encontrarás dos edificios emblemáticos: the King (al número 28) y the Queen (al 72/76). En la esquina con Prince Street no te pierdas el divertido trompe l’oeil de Richard Haas, que pintó una fachada falsa de hierro fundido.
El área también está repleta de galerías de arte, cafeterías, tiendas, y boutiques, y si estás interesado en ir de compras la mayoría de las tiendas se concentran principalmente a lo largo de Prince Street, Broadway, West Broadway, y Spring Street. Las tiendas de alta moda se alternan con tiendas más asequibles para todos, así que vale la pena dar un paseo, admirar las ventanas y tal vez ir de compras.
En la frontera con SoHo y continuando hacia el sur se encuentra en TriBeCa, que es la abreviatura de «Triangle Below Canal Street», que es el triángulo debajo de Canal Street. Esta es, de hecho, la forma de uno de los barrios más de moda en Nueva York. No hay museos ni atracciones turísticas especiales para ver en TriBeCa: el barrio en sí es la verdadera atracción. Una sucesión de pintorescas tiendas, cafeterías y pubs increíbles, frecuentados por gente bien cuidada e impecable. Sí, TriBeCa es un barrio VIP.
En la intersección de North Moore Street y Varick Street se puede visitar la estacion de los bomberos Ghostbusters (4, N Moore St, Nueva York, NY 10013), también hay fotos de los actores tomadas durante el rodaje, pidan permiso para entrar y dar un paseo!
Central Park y Harlem
Otro paseo muy recomendable es el de Central Park, el pulmón verde de Nueva York, no sólo el parque urbano más grande de Nueva York, sino uno de los más importantes del mundo. Tiene más de 4 km de largo y 800 m de ancho, se puede caminar o ir en bici.
Estuve allí la primera vez durante el maratón que terminó justo en Central Park y una segunda vez en un ambiente mucho más tranquilo y relajado, un sábado, después de estar en Harlem que es en la parte norte de Manhattan y se considera el centro cultiral y comercial de la comunidad afroamericana en Manhattan.
Empezamos el día con un brunch en la taberna de Harlem, un restaurante típico frecuentado por los habirantes locales; el entorno es alegre y amable, además había música de jazz en vivo. Si decidís ir allí un domingo, aprovecháis de una misa Evangelio (incluso los miércoles por la noche podéis asistir), la función generalmente comienza a las 11 a.m.
Las cuatro iglesias más famosas de Harlem son las siguientes:
- Abyssinian Baptist Church (132 W 138th St), una de las iglesias bautistas más antiguas y famosas de Harlem, donde los turistas se encuentran en una sección de la iglesia separada de los fieles;
- Canaan Baptist Church (132 W 116th St);
- Convent Avenue Baptist Church (420 W 145th St);
- Greater Hood Memorial AME Zion Church (160 W 146th St).
Después del brunch continuamos el paseo, bordeando la Universidad de Columbia y luego cruzamos la calle 125 que es la calle principal de Harlem, donde se siente la verdadera vitalidad del vecindario.
Desde allí siempre caminamos hasta Central Park y lo caminamos a lo largo, un paseo muy agradable, el parque nunca cansa de sorprenderte con su sucesión de fuentes, rosas y jardines.
Williamsburg y sus alrededores
Mi viaje a Nueva York ‘duró unos 10 días, de 31/10 a 10/11, la primera parte de 31/10 a 04/11 Estuve en Manhattan porque había comprado el paquete de pectoral+ hotel, de 04/11 a 10/11 en su lugar estaba en Williamsburg (Brooklyn) en un airbnb. Es una solución un poco más barata que os permite estar a 30 minutos del centro de la ciudad (a pocas paradas de metro de Manhattan).
Es el barrio hipster, un área lleno de clubes de moda, tiendas vintage, bares y restaurantes de excelencia y un muchos murales.
Recomiendo encarecidamente, además, después de unos días en el caos de Manhattan, es bueno ir a un lugar un poco más tranquilo, inmediatamente se nota la diferencia entre el ritmo agitado de la isla de Mnhattan y el suburbano más tranquilo.
A pesar de ser un suburbio, el vecindario de Williamsburg en Brooklyn es absolutamente una de las cosas qué ver en Nueva York. Sin olvidar que desde Williamsburg se pueden admirar espectaculares vistas del horizonte de Manhattan, gracias a numerosos muelles y terrazas a orillas del río Hudson.
Williamsbourg es perfecto para pasar una noche, entre los lugares para beber algo os recomiendo el Westlight, un bar en la azotea con impresionantes vistas. Tiene una gran terraza y buena variedad de bebidas (con un precio de unos 15-18 $ por bebida) y se puede tapear algo (15-20 $ por plato). Cuando estuvimos allà habia música en vivoy no logramos a hacer con conversación por lo tanto, después de aprovechar la vista y haber saboreado un bebida, preferimos continuar el paseo.
El barrio está lleno de bares y clubes encantadores, otro bar que recomiendo es el Hotel Delmano, un bar Estilo de la década de 1930, muy especial. Precios aceptables (cócteles a 10-12 $).
Un recorrido por el vecindario también es una oportunidad para visitar la cervecería Brooklyn Brewery. Visitas guiadas también se organizan por la noche para observar cómo se elabora la cerveza artesanal, de lo contrario se pueden probar los diferentes tipos de cervezas (6$ cada una) bisándose de nachos o patatas fritas.
En el último día de nuestro viaje a Nueva York disfrutamos de un brunch en el Café Mogador (unos 20 $ por persona) una cocina marroquí (gran hummus) también recomendada para el almuerzo / cena, donde disfrutar de un ambiente relajado y acogedor y la comida es exquisita.
Dumbo
Dumbo està por Down Under the Manhattan Bridge Overpass, es un antiguo distrito industrial y se puede ver desde los muchos edificios de estilo fábrica, y los antiguos almacenes se convirtieron en cafeterías, pequeñas tiendas y lofts exclusivos. . DUMBO es ahora un barrio de galerías de arte, boutiques y apartamentos de lujo.
En tu viaje a Nueva York, intenta disfrutar de una tarde para dar un agradable paseo hasta Brooklyn Bridge Park que se extiende por unos 2 kilómetros a lo largo de toda el área del East River. Recomiendo ir a Pebble Beach y esperar el atardecer, tomaráis algunas fotos hermosas en el telón de fondo de los puentes de Brooklyn y Manhattan. También dentro del Brooklyn Bridge Park, justo debajo del puente de Brooklyn, encontraréis el carrusel de caballos de Jane’s Carousel. Construido en 1922 todavía está en funcionamiento dentro de una estructura de vidrio y será una diversión garantizada para todos los niños (a veces incluso para adultos!).
En nuestro paseo nos detuvimos en un café que se casa con el ambiente del vecindario, Brooklyn Roasting Company; café es genial, tostado directamente en el acto, también venden paquetes de regalo.
Después fuimos al Time Out Market, el bar de la azotea tiene una vista loca (la foto de portada fue tomada directamente desde la azotea del bar).
A continuación, podéis alquilar una bicicleta y montar el puente de Brooklyn de vuelta a Manhattan o tomar el ferry (al mismo precio que el metro) y volver a Williamsburg como hicimos nosotras, vale la pena y lo recomiendo encarecidamente.
Conclusiones
Mi viaje a Nueva York quedará grabado en la memoria de los olores de la comida en cualquier esquina, el vapor que sale desde las calles de Manhattan, la constante sensación de caminar en un set de cine y la magia encerrada en el horizonte de Manhattan que se ilumina lentamente al atardecer. Cada barrio en Nueva York tiene su propia personalidad y estilo, y la nota doloriente es el corto tiempo para viajar a lo largo y ancho de la ciudad.
El Maratón de Nueva York también fue una experiencia fantástica y no sólo por los puntos escénicos que he cruzado durante la ruta, sino especialmente por las personas que para toda la ruta me han apoyado y animado. Una ciudad de más de 8 millones de personas que en este día se detienen a celebrar con ustedes. ¡Sale la ganas de correr incluso a los que no le gusta, te lo aseguro!
Nueva York fue para mí una maravilla mezclada de emoción, una ciudad que siempre recordaré con una sonrisa.
